Maro
28/10/2014, 20:18
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El día que Xabi Alonso abandonó el Real Madrid, Toni Kroos se quedó solo ante el peligro. Se marchaba el jugador que había marcado el rumbo del equipo blanco durante los últimos cinco años, un futbolista cuya influencia trascendía más allá del terreno de juego. En el vestuario, muchos jugadores se temieron lo peor, pero hoy, 102 días después de que el alemán aterrizara en en el Bernabéu, muy pocos se acuerdan de Alonso.
Kroos se ha hecho con el mando del Real Madrid y lo guía con una precisión que impresiona hasta a sus compañeros. “Es un fenómeno”, aseguraron tras la exhibición que dio ante el Barcelona, la enésima de la temporada, pero el partido que le ha confirmado como un mediocentro de categoría. El campeón del mundo llegó al Real Madrid con la vitola de ser un excelente llegador y hoy ya es jugador referencia en el centro del campo.
Ante el Barça, el pasado sábado, el Madrid tuvo más posesión que nunca en el Clásico. Y casi todas las jugadas tenían un denominador común: Toni Kroos. El alemán fue el futbolista que más intervino en el partido, con un acierto en el pase sensacional. Dio 59 pases y solo falló dos. Una efectividad del 96%, ratio superior incluso al que acumula en el total de la temporada.
Kroos tiene un 94% de acierto en el pase tanto en Liga como en Champions, índice espectacular para un jugador que ha jugado los 12 encuentros. En la Liga, ha dado 624 pases buenos -líder del campeonato- y solo 44 malos. Y en la Champions, 175 buenos por 166 malos. Números que le convierten en el GPS del Real Madrid esta temporada.
La consigna de Ancelotti es clara: balones a Kroos. Y el alemán los distribuye con la mejor intención posible. Por sus botas pasan una media de 51 jugadas de ataque por partido, lo que le convierte en una referencia para sus compañeros. James, Modric y Cristiano Ronaldo son sus mejores socios en el campo, lo que refleja su filosofía de juego. Kroos es un mediocentro que siempre mira hacia adelante, hasta el punto de que más de la mitad de sus pases son en campo contrario. Arriesga y no falla. Otro punto a su favor.
Fisicamente fuerte.
Pero Kroos no solo juega. También trabaja. El alemán corre una media de 11 kilómetros por partido, siendo el líder del equipo blanco también en este apartado. Y por ahora, pese a ser el jugador que menos vacaciones tuvo tras el Mundial, no se ha resentido físicamente. Toni se ha adaptado a su nueva posición en un tiempo récord y cumple en tareas defensivas como el mejor de los mediocentros. En lo que llevamos de curso promedia siete recuperaciones por encuentro, el mejor del equipo después de Sergio Ramos. Fiabilidad alemana.
MARCA.com
El día que Xabi Alonso abandonó el Real Madrid, Toni Kroos se quedó solo ante el peligro. Se marchaba el jugador que había marcado el rumbo del equipo blanco durante los últimos cinco años, un futbolista cuya influencia trascendía más allá del terreno de juego. En el vestuario, muchos jugadores se temieron lo peor, pero hoy, 102 días después de que el alemán aterrizara en en el Bernabéu, muy pocos se acuerdan de Alonso.
Kroos se ha hecho con el mando del Real Madrid y lo guía con una precisión que impresiona hasta a sus compañeros. “Es un fenómeno”, aseguraron tras la exhibición que dio ante el Barcelona, la enésima de la temporada, pero el partido que le ha confirmado como un mediocentro de categoría. El campeón del mundo llegó al Real Madrid con la vitola de ser un excelente llegador y hoy ya es jugador referencia en el centro del campo.
Ante el Barça, el pasado sábado, el Madrid tuvo más posesión que nunca en el Clásico. Y casi todas las jugadas tenían un denominador común: Toni Kroos. El alemán fue el futbolista que más intervino en el partido, con un acierto en el pase sensacional. Dio 59 pases y solo falló dos. Una efectividad del 96%, ratio superior incluso al que acumula en el total de la temporada.
Kroos tiene un 94% de acierto en el pase tanto en Liga como en Champions, índice espectacular para un jugador que ha jugado los 12 encuentros. En la Liga, ha dado 624 pases buenos -líder del campeonato- y solo 44 malos. Y en la Champions, 175 buenos por 166 malos. Números que le convierten en el GPS del Real Madrid esta temporada.
La consigna de Ancelotti es clara: balones a Kroos. Y el alemán los distribuye con la mejor intención posible. Por sus botas pasan una media de 51 jugadas de ataque por partido, lo que le convierte en una referencia para sus compañeros. James, Modric y Cristiano Ronaldo son sus mejores socios en el campo, lo que refleja su filosofía de juego. Kroos es un mediocentro que siempre mira hacia adelante, hasta el punto de que más de la mitad de sus pases son en campo contrario. Arriesga y no falla. Otro punto a su favor.
Fisicamente fuerte.
Pero Kroos no solo juega. También trabaja. El alemán corre una media de 11 kilómetros por partido, siendo el líder del equipo blanco también en este apartado. Y por ahora, pese a ser el jugador que menos vacaciones tuvo tras el Mundial, no se ha resentido físicamente. Toni se ha adaptado a su nueva posición en un tiempo récord y cumple en tareas defensivas como el mejor de los mediocentros. En lo que llevamos de curso promedia siete recuperaciones por encuentro, el mejor del equipo después de Sergio Ramos. Fiabilidad alemana.
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