tino_1970
11/09/2014, 10:57
Camino despejado. Asier Illarramendi tiene que empezar a demostrar los motivos por los que Florentino Pérez dio el ok a su fichaje en el verano de 2013 a cambio de 34 millones de euros. La lesión de Khedira obliga a Ancelotti a contar con el ex de la Real Sociedad. Modric, Kroos y el internacional sub-21 son los únicos especialistas para la posición de mediocentro y antes o después sabe que recibirá una oportunidad. Su momento ha llegado y el jugador debe responder. No le queda otra. Este verano diferentes equipos preguntaron por su situación pero tanto el presidente como el entrenador decidieron dar una nueva oportunidad al centrocampista, rechazando las llamadas que recibieron presentando todo tipo de ofertas.
Milan y Real Sociedad fueron los últimos equipos en sumarse a la lista de pretendientes de un jugador que deslumbró en el europeo sub-21 de 2103 y que pasó de puntillas en su primera temporada con el Real Madrid. La escuadra italiana fue la que más interés mostró y la que hubiera significado continuar en la elite pese a que el equipo de Fernando Torres está fuera de Europa. Mientras que la Real Sociedad se interesó por su fichaje en los últimos compases del mercado de verano. Las dudas con las que inició la temporada el equipo donostiarra, le llevaron a pedir la cesión.
La respuesta negativa no dejó lugar a duda alguna. Y lo curioso es que fue el propio Ancelotti el que dio primero el paso de negar cualquier opción a la salida de Illarramendi. Llama la atención que el técnico le considere vital para esta campaña cuando terminó la pasada sin apenas contar con él y ha iniciado el presente ejercicio emitiendo las mismas señales. El centrocampista, pese a llevar más tiempo que nadie entrenándose, apenas ha aparecido en los primeros partidos oficiales. Illarra tan solo suma siete minutos en los cinco partidos que ha disputado el equipo blanco., pero no desespera. Sabe que tendrá su oportunidad y tampoco ha pesando en la salida como solución.
Ancelotti ha basado su confianza en la capacidad de mejora y de adaptación que cree tener el ex de la Real Sociedad. La decisión es anterior a la lesión de Khedira, circunstancia que llama la atención ante la falta de confianza que ha demostrado en este inicio de competición. Piensa que según avance la temporada, Illaramendi irá aportando y apareciendo en el once con más asiduidad. Ahora con la lesión del alemán, ausente hasta el mes de noviembre, el entrenador no tiene más remedio que demostrar que se quedó con el internacional sub-21 porque verdaderamente cree en él.
Florentino Pérez apostó por su fichaje y ahora también lo ha hecho por su continuidad. El de Mutriku apareció por el Bernabéu dentro de ese toque español que pretendió dar el dirigente madridista a su equipo. Confía en él y cree que se merece otra oportunidad, tal y como le sucede a Isco, jugador que fue de menos a más y que ahora el presidente cree que cambiará la trayectoria que hay a su alrededor, al menos respecto al Real Madrid.
Cara el derbi del sábado, Ancelotti no tiene pensado dar entrada en el once al ex de la Real Sociedad. Si finalmente cambia el dibujo y coloca a dos mediocentros puros por delante de la defensa tiene más posibilidad de aparecer en algún momento bien del partido ante el Atlético o durante la temporada. Su futuro dependerá y mucho del dibujo táctico que emplee Ancelotti. Y si le ha 'obligado' a quedarse…
El Confidencial
Milan y Real Sociedad fueron los últimos equipos en sumarse a la lista de pretendientes de un jugador que deslumbró en el europeo sub-21 de 2103 y que pasó de puntillas en su primera temporada con el Real Madrid. La escuadra italiana fue la que más interés mostró y la que hubiera significado continuar en la elite pese a que el equipo de Fernando Torres está fuera de Europa. Mientras que la Real Sociedad se interesó por su fichaje en los últimos compases del mercado de verano. Las dudas con las que inició la temporada el equipo donostiarra, le llevaron a pedir la cesión.
La respuesta negativa no dejó lugar a duda alguna. Y lo curioso es que fue el propio Ancelotti el que dio primero el paso de negar cualquier opción a la salida de Illarramendi. Llama la atención que el técnico le considere vital para esta campaña cuando terminó la pasada sin apenas contar con él y ha iniciado el presente ejercicio emitiendo las mismas señales. El centrocampista, pese a llevar más tiempo que nadie entrenándose, apenas ha aparecido en los primeros partidos oficiales. Illarra tan solo suma siete minutos en los cinco partidos que ha disputado el equipo blanco., pero no desespera. Sabe que tendrá su oportunidad y tampoco ha pesando en la salida como solución.
Ancelotti ha basado su confianza en la capacidad de mejora y de adaptación que cree tener el ex de la Real Sociedad. La decisión es anterior a la lesión de Khedira, circunstancia que llama la atención ante la falta de confianza que ha demostrado en este inicio de competición. Piensa que según avance la temporada, Illaramendi irá aportando y apareciendo en el once con más asiduidad. Ahora con la lesión del alemán, ausente hasta el mes de noviembre, el entrenador no tiene más remedio que demostrar que se quedó con el internacional sub-21 porque verdaderamente cree en él.
Florentino Pérez apostó por su fichaje y ahora también lo ha hecho por su continuidad. El de Mutriku apareció por el Bernabéu dentro de ese toque español que pretendió dar el dirigente madridista a su equipo. Confía en él y cree que se merece otra oportunidad, tal y como le sucede a Isco, jugador que fue de menos a más y que ahora el presidente cree que cambiará la trayectoria que hay a su alrededor, al menos respecto al Real Madrid.
Cara el derbi del sábado, Ancelotti no tiene pensado dar entrada en el once al ex de la Real Sociedad. Si finalmente cambia el dibujo y coloca a dos mediocentros puros por delante de la defensa tiene más posibilidad de aparecer en algún momento bien del partido ante el Atlético o durante la temporada. Su futuro dependerá y mucho del dibujo táctico que emplee Ancelotti. Y si le ha 'obligado' a quedarse…
El Confidencial