titojose54
23/10/2012, 13:59
El Celtic visita al equipo azulgrana, que sigue sumando buenos resultados pese a sus descontrolados partidos.
A estas alturas de temporada, con el ejemplo reciente del 4-5 en Riazor, ya se puede afirmar que el Barsa de Tito Vilanova es muy diferente al de las tres primeras temporadas de Pep Guardiola, pero bastante parecido al de la última campaña del técnico de Santpedor. No es que con el nuevo primer entrenador las cosas hayan ido a mejor en lo ofensivo o a peor en lo defensivo, simplemente parece más una inercia que tomó el equipo hace meses y que ahora cuesta enderezar para mal, por el sufrimiento por el desenlace de los partidos, o quien sabe si para bien, por el resultado que se acaba logrando. Y en los análisis de esa transformación de un Barsa horizontal y pausado en un Barsa vertical y alocado siempre surge un nombre: Cesc Fàbregas.
Guardiola inventó un 1-3-4-3 para dar cabida en el pasado curso a un jugador que se fue del Camp Nou con 16 años con ADN Barsa y que volvió en 2011 con ADN ‘Premier League’: menos toque y más buscar la portería o el área. Eso desorganiza al paciente Barsa de Busquets, Xavi e Iniesta, pero reactiva a Leo Messi, quien disfruta como un niño creando ocasiones una y otra vez al lado del jugador con el que coincidió en el cadete azulgrana. Dicen que ya jugaban así entonces... con Tito Vilanova de entrenador. Quizás no sea casualidad y todo esté dentro de un guión...
En pleno debate sobre esa pequeña ‘revolución’ táctica llega el Celtic al Camp Nou en la tercera jornada de la Liga de Campeones, en la que el Barsa suma dos victorias en dos partidos, aunque con luces y sombras, más o menos como en la Liga, donde el equipo azulgrana apenas ha controlado los partidos pese a cosechar siete victorias y un empate en ocho jornadas. Tuvo que remontar un 1-2 al Spartak de Moscú en el Camp Nou para ganar 3-2 y en Lisboa, pese al 0-2 final, el Benfica creó varias ocasiones y numerosas llegadas al área de Víctor Valdés.
Aquel encuentro pasó factura con la lesión de Puyol (luxación de codo) y la tarjeta roja a Sergio Busquets por un absurdo cara a cara callejero con Maxi Pereira con el partido resuelto que le ha costado dos partidos de sanción. Los dos son bajas para recibir al equipo escocés, al igual que los todavía lesionados Alves y Piqué, que llevan tiempo en la enfermería con Muniesa y Abidal, dos defensas más.
A Tito Vilanova solo le quedan seis jugadores para cinco puestos defensivos. Y si sigue sin contar con el canterano Bartra, algo verde todavía para él, la única disposición posible es Montoya, Mascherano, Adriano y Alba, con Song por delante. Desde luego, por alto no intimidarán demasiado a torres como Hooper, Samaras, Wanyama o Ambrose. La situación podría conllevar la titularidad de Bartra, el más espigado de los defensas del Barsa. Valdés, en un momento dubitativo, necesita estar bien arropado.
En ataque, con Xavi, Iniesta y Cesc disponibles y en buena forma, los sacrificados podrían ser Alexis y Villa para que el de Fuentealbilla por la izquierda acompañe a Messi y Pedro. El Celtic, lejos de perder competitividad en la ‘Premier’ escocesa debido al descenso administrativo del Rangers, llega fuerte, tras un 0-5 liguero ante el St. Mirren y avalado por su primera victoria europea a domicilio en la Liga de Campeones en toda su historia: 2-3 ante el Spartak de Moscú. Está invicto, pues ante el Benfica empató 0-0.:gol:
Y aunque nunca ha ganado en el Camp Nou, el conjunto de Glasgow se ha llevado dos empates meritorios, uno en la Liga de Campeones 2004-05(1-1) y otro en la edición de 2003-04 de la antigua UEFA (0-0) que supuso la eliminación azulgrana.
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Puyol, durante un entrenamiento.
A estas alturas de temporada, con el ejemplo reciente del 4-5 en Riazor, ya se puede afirmar que el Barsa de Tito Vilanova es muy diferente al de las tres primeras temporadas de Pep Guardiola, pero bastante parecido al de la última campaña del técnico de Santpedor. No es que con el nuevo primer entrenador las cosas hayan ido a mejor en lo ofensivo o a peor en lo defensivo, simplemente parece más una inercia que tomó el equipo hace meses y que ahora cuesta enderezar para mal, por el sufrimiento por el desenlace de los partidos, o quien sabe si para bien, por el resultado que se acaba logrando. Y en los análisis de esa transformación de un Barsa horizontal y pausado en un Barsa vertical y alocado siempre surge un nombre: Cesc Fàbregas.
Guardiola inventó un 1-3-4-3 para dar cabida en el pasado curso a un jugador que se fue del Camp Nou con 16 años con ADN Barsa y que volvió en 2011 con ADN ‘Premier League’: menos toque y más buscar la portería o el área. Eso desorganiza al paciente Barsa de Busquets, Xavi e Iniesta, pero reactiva a Leo Messi, quien disfruta como un niño creando ocasiones una y otra vez al lado del jugador con el que coincidió en el cadete azulgrana. Dicen que ya jugaban así entonces... con Tito Vilanova de entrenador. Quizás no sea casualidad y todo esté dentro de un guión...
En pleno debate sobre esa pequeña ‘revolución’ táctica llega el Celtic al Camp Nou en la tercera jornada de la Liga de Campeones, en la que el Barsa suma dos victorias en dos partidos, aunque con luces y sombras, más o menos como en la Liga, donde el equipo azulgrana apenas ha controlado los partidos pese a cosechar siete victorias y un empate en ocho jornadas. Tuvo que remontar un 1-2 al Spartak de Moscú en el Camp Nou para ganar 3-2 y en Lisboa, pese al 0-2 final, el Benfica creó varias ocasiones y numerosas llegadas al área de Víctor Valdés.
Aquel encuentro pasó factura con la lesión de Puyol (luxación de codo) y la tarjeta roja a Sergio Busquets por un absurdo cara a cara callejero con Maxi Pereira con el partido resuelto que le ha costado dos partidos de sanción. Los dos son bajas para recibir al equipo escocés, al igual que los todavía lesionados Alves y Piqué, que llevan tiempo en la enfermería con Muniesa y Abidal, dos defensas más.
A Tito Vilanova solo le quedan seis jugadores para cinco puestos defensivos. Y si sigue sin contar con el canterano Bartra, algo verde todavía para él, la única disposición posible es Montoya, Mascherano, Adriano y Alba, con Song por delante. Desde luego, por alto no intimidarán demasiado a torres como Hooper, Samaras, Wanyama o Ambrose. La situación podría conllevar la titularidad de Bartra, el más espigado de los defensas del Barsa. Valdés, en un momento dubitativo, necesita estar bien arropado.
En ataque, con Xavi, Iniesta y Cesc disponibles y en buena forma, los sacrificados podrían ser Alexis y Villa para que el de Fuentealbilla por la izquierda acompañe a Messi y Pedro. El Celtic, lejos de perder competitividad en la ‘Premier’ escocesa debido al descenso administrativo del Rangers, llega fuerte, tras un 0-5 liguero ante el St. Mirren y avalado por su primera victoria europea a domicilio en la Liga de Campeones en toda su historia: 2-3 ante el Spartak de Moscú. Está invicto, pues ante el Benfica empató 0-0.:gol:
Y aunque nunca ha ganado en el Camp Nou, el conjunto de Glasgow se ha llevado dos empates meritorios, uno en la Liga de Campeones 2004-05(1-1) y otro en la edición de 2003-04 de la antigua UEFA (0-0) que supuso la eliminación azulgrana.
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Puyol, durante un entrenamiento.