Charismatic Enigma
27/05/2012, 14:25
El Real Madrid Castilla ya es equipo de Segunda División. Cinco años después de que los Mata, Granero o Negredo, con Míchel en el banquillo, no pudieran evitar el descenso a Segunda B, el filial madridista regresa a la categoría de plata del fútbol español. Y lo hace por la puerta grande. Después de quedar campeón de su grupo, el conjunto blanco se ha impuesto en los dos partidos de la eliminatoria al Cádiz con una superioridad inusitada. 0-3 y 5-1 han sido los resultados.
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Precisamente por ser campeones de grupo, Castilla y Cádiz gozaban de dos oportunidades para ascender. El Castilla aprovechó la primera; el Cádiz tendrá que esperar. Decía Toril, entrenador del filial y uno de los grandes artífices del logro, días antes de que diese comienzo la eliminatoria, que el partido clave sería el de ida, el disputado en el Ramón de Carranza. No se equivocaba. Allí el conjunto blanco venció y convenció por 0-3 y para el partido de vuelta la remontada gaditana quedaba poco menos que imposible.
Debido a ello, al gran resultado cosechado en la Tácita de Plata, las gradas del Alfredo Di Stéfano presentaban un ambiente festivo, casi de celebración. Aunque por supuesto había que jugar el partido. Antes de que comenzara se guardó un emotivo minuto de silencio por el reciente fallecimiento de 'Pitina', esposa de Florentino Pérez. Por cierto que al presidente se le vio llorar en el palco al recordar a su mujer. No se lo perdió el jefe y tampoco lo hicieron Mourinho y Karanka, presentes también en el estadio.
Si el Cádiz tenía mínimas opciones de remontar la eliminatoria, estas terminaron de agotarse a los 10 minutos de comenzar el choque. Ahí, Baquero no llegó a conectar en boca de gol con una pelota llegada desde la izquierda, en lo que sería la major ocasión cadista de toda la primera parte. Un par de minutos después, el mismo Baquero se hacía el 'harakiri' y Jesé le robaba la cartera para regatear a Aulestia y hacer el 1-0. El canario llegó ayer desde Italia de jugar el Preeuropeo con la Sub-19 y hoy abría la lata. Mejor imposible.
A partir de entonces, los nervios que podía haber en los jugadores del filial desparecieron y dieron pase al disfrute. Y al buen juego. Con todo ello, las ocasiones no dejaron de llegar. Morata y Joselu tuvieron el 2-0. Precisamente este último tiró fuera un penalti dudoso que le hicieron a Álvaro. En el segundo tiempo se resarciría el '9' blanco. Sin tiempo para lamentarse, Mosquera engañó a todos en una falta en la que chutó directamente a puerta e hizo el 2-0. Golazo sin discusión.
Quedaban 45 minutos de eliminatoria. Tres cuartos de hora para honrar a la afición que tanto les ha apoyado durante la temporada. Aunque fuera una eliminatoria por el ascenso, la distancia en el global de cinco goles entre ambos equipos hizo que el choque perdiera tensión. Mientras el Cádiz comenzaba a pensar en su segunda oportunidad para ascender, el Castilla restaba los minutos que le quedaban para el fiestón. Aún con ello, hubo goles. Hasta cuatro y alguno de ellos de bonita factura.
En el 57', Joselu redondeó su temporadón con su gol 22 (tres en esta eliminatoria) tras un buen desmarque al espacio y mejor disparo cruzado. La relajación hizo que el Cádiz marcara el gol del honor por medio de De Coz. Los amarillos sacaron rápido una falta y pillaron al conjunto local despistado. Aunque la fiesta era ya completa, Mosquera y Morata se encargaron en los minutos finales de redondear el electrónico y completar toda una señora 'manita'. Inmejorable forma de regresar a Segunda. Con cinco goles, cinco años después. Puerta grande.
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Precisamente por ser campeones de grupo, Castilla y Cádiz gozaban de dos oportunidades para ascender. El Castilla aprovechó la primera; el Cádiz tendrá que esperar. Decía Toril, entrenador del filial y uno de los grandes artífices del logro, días antes de que diese comienzo la eliminatoria, que el partido clave sería el de ida, el disputado en el Ramón de Carranza. No se equivocaba. Allí el conjunto blanco venció y convenció por 0-3 y para el partido de vuelta la remontada gaditana quedaba poco menos que imposible.
Debido a ello, al gran resultado cosechado en la Tácita de Plata, las gradas del Alfredo Di Stéfano presentaban un ambiente festivo, casi de celebración. Aunque por supuesto había que jugar el partido. Antes de que comenzara se guardó un emotivo minuto de silencio por el reciente fallecimiento de 'Pitina', esposa de Florentino Pérez. Por cierto que al presidente se le vio llorar en el palco al recordar a su mujer. No se lo perdió el jefe y tampoco lo hicieron Mourinho y Karanka, presentes también en el estadio.
Si el Cádiz tenía mínimas opciones de remontar la eliminatoria, estas terminaron de agotarse a los 10 minutos de comenzar el choque. Ahí, Baquero no llegó a conectar en boca de gol con una pelota llegada desde la izquierda, en lo que sería la major ocasión cadista de toda la primera parte. Un par de minutos después, el mismo Baquero se hacía el 'harakiri' y Jesé le robaba la cartera para regatear a Aulestia y hacer el 1-0. El canario llegó ayer desde Italia de jugar el Preeuropeo con la Sub-19 y hoy abría la lata. Mejor imposible.
A partir de entonces, los nervios que podía haber en los jugadores del filial desparecieron y dieron pase al disfrute. Y al buen juego. Con todo ello, las ocasiones no dejaron de llegar. Morata y Joselu tuvieron el 2-0. Precisamente este último tiró fuera un penalti dudoso que le hicieron a Álvaro. En el segundo tiempo se resarciría el '9' blanco. Sin tiempo para lamentarse, Mosquera engañó a todos en una falta en la que chutó directamente a puerta e hizo el 2-0. Golazo sin discusión.
Quedaban 45 minutos de eliminatoria. Tres cuartos de hora para honrar a la afición que tanto les ha apoyado durante la temporada. Aunque fuera una eliminatoria por el ascenso, la distancia en el global de cinco goles entre ambos equipos hizo que el choque perdiera tensión. Mientras el Cádiz comenzaba a pensar en su segunda oportunidad para ascender, el Castilla restaba los minutos que le quedaban para el fiestón. Aún con ello, hubo goles. Hasta cuatro y alguno de ellos de bonita factura.
En el 57', Joselu redondeó su temporadón con su gol 22 (tres en esta eliminatoria) tras un buen desmarque al espacio y mejor disparo cruzado. La relajación hizo que el Cádiz marcara el gol del honor por medio de De Coz. Los amarillos sacaron rápido una falta y pillaron al conjunto local despistado. Aunque la fiesta era ya completa, Mosquera y Morata se encargaron en los minutos finales de redondear el electrónico y completar toda una señora 'manita'. Inmejorable forma de regresar a Segunda. Con cinco goles, cinco años después. Puerta grande.