Pep_Guardiola
14/08/2010, 14:55
Hace 40 años Franz Beckenbauer dominaba el planeta fútbol. Hoy los tiempos han cambiado. Este Madrid es el de Mourinho, pero capitaneado por un campeonísimo del mundo, Iker Casillas. No vamos a aportar nuevos apelativos a un portero al que todos admiramos. Simplemente, teníamos la corazonada de que Badstuber no iba a poder con Iker en el punto de penalti a los siete minutos de juego. Y así fue durante todo el partido. El mostoleño hurgó en la herida alemana de la Eurocopa y el Mundial. Ahora los españoles pueden a los alemanes. En tiempos de Franz esto era impensable. Esta lectura debe servir al vestuario blanco. En 1980 el Madrid perdió un amistoso ante el Bayern 9-1. Todos sabemos que eso con Casillas no hubiera ocurrido. Pero al final de aquella temporada se llegó a la final de la Copa de Europa ante el Liverpool. ¿Qué no va a poder hacer este portero si ayer permitió al equipo llevarse el torneo en la tanda de penaltis?
La llave de este Madrid la tiene Casillas. Mourinho, el inquilino en el banquillo, está construyendo la casa para el duro invierno. El 4-2-3-1 con el que salió ayer no cuajó de inicio. Pero que la calefacción no funcione en verano no tiene por qué ser preocupante en estos momentos. Sacó un once casi de gala, pero con varios internacionales madridistas exhaustos por cruzar el charco. Ésta puede ser la razón del mal partido de Ramos. El penalti que cometió fue por no pensar. Se complicó la vida en territorio prohibido, precisamente, con los dos debutantes, Khedira y Carvalho (solo un entrenamiento juntos). Pero, luego, Ribéry le ganaba todas las acciones en banda. El de Camas, otro queridísimo campeón del mundo, no tuvo su noche. ¿Suspirará Mou por Maicon?
Espeso.
El Madrid no carburó. Aunque hubo acciones individuales como la de Cristiano en el 17' (que casi acaba en gol de Higuaín), un disparo suyo desde la frontal en el 35' o un cabezazo a pase de Benzema que levantaron el aplauso del Allianz Arena. Casillas salvó los muebles en cinco ocasiones durante la primera mitad: el penalti, el posterior rechace de Müller, el cañonazo de Pranjic y el mano a mano ante Ribéry y Klose. Mourinho no paraba de tomar notas. El equipo no estaba junto. El juego estaba muy volcado a la derecha. Canales perdió presencia respecto a anteriores amistosos. Xabi y Khedira deben acoplarse. El alemán jugó por delante del donostiarra. Aguantó todo el encuentro físicamente (es un portento), pero se espera más de él, como de Carvalho. De todos modos, se nota que los Pranjic, Müller y compañía estaban más frescos y rodados.
El carrusel de cambios durante la segunda parte favoreció al Madrid. Higuaín no tuvo suerte, pero Benzema apuntó maneras. Salió con ganas y creó peligro. Parece que el francés está dispuesto a ofrecer su mejor versión. Luego, Van der Vaart tuvo el 0-1 en el 61', pero mandó la pelota al lateral de la red cuando estaba solo dentro del área. Al final, el homenaje a Beckenbauer se decidió en los penaltis. Badstuber se quitó la espina ante Iker en los once metros, pero el portero paró los lanzamientos de Altintop y Braafheid. Esta casa tiene resistentes cimientos
La llave de este Madrid la tiene Casillas. Mourinho, el inquilino en el banquillo, está construyendo la casa para el duro invierno. El 4-2-3-1 con el que salió ayer no cuajó de inicio. Pero que la calefacción no funcione en verano no tiene por qué ser preocupante en estos momentos. Sacó un once casi de gala, pero con varios internacionales madridistas exhaustos por cruzar el charco. Ésta puede ser la razón del mal partido de Ramos. El penalti que cometió fue por no pensar. Se complicó la vida en territorio prohibido, precisamente, con los dos debutantes, Khedira y Carvalho (solo un entrenamiento juntos). Pero, luego, Ribéry le ganaba todas las acciones en banda. El de Camas, otro queridísimo campeón del mundo, no tuvo su noche. ¿Suspirará Mou por Maicon?
Espeso.
El Madrid no carburó. Aunque hubo acciones individuales como la de Cristiano en el 17' (que casi acaba en gol de Higuaín), un disparo suyo desde la frontal en el 35' o un cabezazo a pase de Benzema que levantaron el aplauso del Allianz Arena. Casillas salvó los muebles en cinco ocasiones durante la primera mitad: el penalti, el posterior rechace de Müller, el cañonazo de Pranjic y el mano a mano ante Ribéry y Klose. Mourinho no paraba de tomar notas. El equipo no estaba junto. El juego estaba muy volcado a la derecha. Canales perdió presencia respecto a anteriores amistosos. Xabi y Khedira deben acoplarse. El alemán jugó por delante del donostiarra. Aguantó todo el encuentro físicamente (es un portento), pero se espera más de él, como de Carvalho. De todos modos, se nota que los Pranjic, Müller y compañía estaban más frescos y rodados.
El carrusel de cambios durante la segunda parte favoreció al Madrid. Higuaín no tuvo suerte, pero Benzema apuntó maneras. Salió con ganas y creó peligro. Parece que el francés está dispuesto a ofrecer su mejor versión. Luego, Van der Vaart tuvo el 0-1 en el 61', pero mandó la pelota al lateral de la red cuando estaba solo dentro del área. Al final, el homenaje a Beckenbauer se decidió en los penaltis. Badstuber se quitó la espina ante Iker en los once metros, pero el portero paró los lanzamientos de Altintop y Braafheid. Esta casa tiene resistentes cimientos