Pep_Guardiola
08/02/2010, 10:58
La Romareda vivió ayer su mejor tarde en tres años. Por primera vez en ese tiempo, el Zaragoza, el 'nuevo' Zaragoza de los siete fichajes invernales, jugó un partido serio, no mostró debilidad y fue descarado en el ataque. Mucho ayudó un Sevilla con la cabeza en la Copa. El plan B le falló a Jiménez y ello le costó caerse de la Champions. Mientras, el Zaragoza escapó del descenso.
Paredes hizo saltar por los aires el planteamiento de Gay. Una lesión muscular le mandó al vestuario en el minuto 8 y con Ander arrancaba otro partido. En ese nuevo escenario, el Sevilla creció con dos ocasiones de Negredo y un cabezazo de Cala que silbó junto a la escuadra. Los locales encajaron pronto el golpe y cerraron esa vía abierta por el Sevilla. Solucionado el problema atrás, se fueron hacia adelante. Suazo, Colunga y Arizmendi firmaron las amenazas, pero fue Contini quien estrenó el marcador.
La ironía resultó exquisita. El Zaragoza se fue a Segunda hace dos campañas porque no tenía defensa. Un año y medio después, ya este invierno, el club se tomó en serio el asunto con Contini y Jarosik. Y tuvo que ser el primero quien personificara la reacción aragonesa. La cosa no quedó ahí, Jarosik se quedó a centímetros de firmar el segundo, pero no llegó. Fue Negredo el que la introdujo sin querer. El punta estuvo muy cerca de llegar a La Romareda en verano y al final se fue al Sánchez Pizjuán. De traca.
Movimiento.
Entre ambas alegrías, Kanouté había sellado el empate a uno después de que Carrizo se perdiera en una excursión dominical por su área. Aquel fue el único intento sobre el gol del Sevilla tras el cuarto de hora inicial.
Manolo Jiménez entendió que el paseo de fin de semana merecía mayor seriedad y activó a Perotti, Renato y Navas en el segundo acto. Allí el Zaragoza siguió con el gesto serio en defensa y templó su alegría en el ataque. Sin embargo, los andaluces no encontraron vías para llegar a Carrizo. Incluso estuvo más cerca el tercero local con un cabezazo de Ander que sacó magistralmente Palop. El Sevilla capituló, aunque lo peor fue que perdió por roja a Negredo y Stankevicius, que no jugarán en la Copa.
Jiménez: "No jugamos a nada"
"Ha sido un partido para olvidar en todos los aspectos porque perdimos efectivos importantes para el miércoles, aunque eso será otra historia. Nos hicieron mucho daño a balón parado y eso tenemos que mirarlo. Ahí estuvo la clave del partido. No podemos dejarnos marcar el segundo gol. Hicimos un partido malo y no se vio a ese Sevilla que puede ganarle a cualquiera. Antes hubo partidos para borrar y para enmarcar, pero en éste no jugamos a nada".
Gay: "Tenemos que seguir así"
"Tuve muchas y muy buenas sensaciones durante esta tarde. Primero, por ganar a un equipo como el Sevilla, al que no creo que ganen muchos equipos de los que estamos abajo. Segundo, por salir del descenso. Tercero, por conseguir dos victorias seguidas, que no lo habíamos lograd aún. Y, sobre todo, por el juego del equipo. Hay que seguir porque, como ya dije la semana pasada en Tenerife, sólo hemos subido un peldaño más
Paredes hizo saltar por los aires el planteamiento de Gay. Una lesión muscular le mandó al vestuario en el minuto 8 y con Ander arrancaba otro partido. En ese nuevo escenario, el Sevilla creció con dos ocasiones de Negredo y un cabezazo de Cala que silbó junto a la escuadra. Los locales encajaron pronto el golpe y cerraron esa vía abierta por el Sevilla. Solucionado el problema atrás, se fueron hacia adelante. Suazo, Colunga y Arizmendi firmaron las amenazas, pero fue Contini quien estrenó el marcador.
La ironía resultó exquisita. El Zaragoza se fue a Segunda hace dos campañas porque no tenía defensa. Un año y medio después, ya este invierno, el club se tomó en serio el asunto con Contini y Jarosik. Y tuvo que ser el primero quien personificara la reacción aragonesa. La cosa no quedó ahí, Jarosik se quedó a centímetros de firmar el segundo, pero no llegó. Fue Negredo el que la introdujo sin querer. El punta estuvo muy cerca de llegar a La Romareda en verano y al final se fue al Sánchez Pizjuán. De traca.
Movimiento.
Entre ambas alegrías, Kanouté había sellado el empate a uno después de que Carrizo se perdiera en una excursión dominical por su área. Aquel fue el único intento sobre el gol del Sevilla tras el cuarto de hora inicial.
Manolo Jiménez entendió que el paseo de fin de semana merecía mayor seriedad y activó a Perotti, Renato y Navas en el segundo acto. Allí el Zaragoza siguió con el gesto serio en defensa y templó su alegría en el ataque. Sin embargo, los andaluces no encontraron vías para llegar a Carrizo. Incluso estuvo más cerca el tercero local con un cabezazo de Ander que sacó magistralmente Palop. El Sevilla capituló, aunque lo peor fue que perdió por roja a Negredo y Stankevicius, que no jugarán en la Copa.
Jiménez: "No jugamos a nada"
"Ha sido un partido para olvidar en todos los aspectos porque perdimos efectivos importantes para el miércoles, aunque eso será otra historia. Nos hicieron mucho daño a balón parado y eso tenemos que mirarlo. Ahí estuvo la clave del partido. No podemos dejarnos marcar el segundo gol. Hicimos un partido malo y no se vio a ese Sevilla que puede ganarle a cualquiera. Antes hubo partidos para borrar y para enmarcar, pero en éste no jugamos a nada".
Gay: "Tenemos que seguir así"
"Tuve muchas y muy buenas sensaciones durante esta tarde. Primero, por ganar a un equipo como el Sevilla, al que no creo que ganen muchos equipos de los que estamos abajo. Segundo, por salir del descenso. Tercero, por conseguir dos victorias seguidas, que no lo habíamos lograd aún. Y, sobre todo, por el juego del equipo. Hay que seguir porque, como ya dije la semana pasada en Tenerife, sólo hemos subido un peldaño más