Jackridem
27/04/2009, 20:33
Un árbitro sale ovacionado tras pedir a dos jugadores que se abrazaran después de un conato de pelea
El colegiado onubense Agustín Ramiro Sánchez obligó el pasado fin de semana a dos futbolistas a abrazarse después de protagonizar una trifulca en el terreno de juego, un gesto que, unido a su actuación global, le hizo salir ovacionado del partido.
El árbitro dirigía el encuentro Villablanca-Medina Ársena, de la Primera Regional onubense, que el equipo local ganó por 4-1 y le valió ascender de categoría.
En un lance del encuentro, dos jugadores rivales protagonizaron un conato de pelea, y tras dialogar con ellos, el árbitro se dirigió a ambos, para pedirles que se dieran la mano y posteriormente un abrazo, todo ello sin necesidad alguna de mostrar tarjetas amarillas.
El gesto no pasó inadvertido para el público, que vio además cómo, durante el encuentro, el árbitro paraba el partido en varias ocasiones para explicar a los jugadores distintos conceptos del reglamento.
Todas las crónicas del partido en la prensa local destacan la buena actuación del árbitro, que tiene 42 años, y en el colegio onubense es conocido por su forma de aplicar el reglamento y de instruir a la vez a los futbolistas.
El colegiado onubense Agustín Ramiro Sánchez obligó el pasado fin de semana a dos futbolistas a abrazarse después de protagonizar una trifulca en el terreno de juego, un gesto que, unido a su actuación global, le hizo salir ovacionado del partido.
El árbitro dirigía el encuentro Villablanca-Medina Ársena, de la Primera Regional onubense, que el equipo local ganó por 4-1 y le valió ascender de categoría.
En un lance del encuentro, dos jugadores rivales protagonizaron un conato de pelea, y tras dialogar con ellos, el árbitro se dirigió a ambos, para pedirles que se dieran la mano y posteriormente un abrazo, todo ello sin necesidad alguna de mostrar tarjetas amarillas.
El gesto no pasó inadvertido para el público, que vio además cómo, durante el encuentro, el árbitro paraba el partido en varias ocasiones para explicar a los jugadores distintos conceptos del reglamento.
Todas las crónicas del partido en la prensa local destacan la buena actuación del árbitro, que tiene 42 años, y en el colegio onubense es conocido por su forma de aplicar el reglamento y de instruir a la vez a los futbolistas.