ACastilla
27/04/2009, 15:05
lunes, 27 de abril de 2009 4:07 Johan Cruyff El Barça sigue siendo el favorito
[Only registered and activated users can see links] ([Only registered and activated users can see links])La remontada del Madrid es impresionante, pero el Barça sigue siendo el favorito y, en el peor de los casos, saldrá líder del Bernabéu. Pero antes llega el Chelsea y hay que corregir los errores de Mestalla.
Esta jornada ha servido para acabar con la cantinela de gano yo en Valencia, pierde el Madrid en Sevilla y a ganar la Liga en el Bernabéu. Las Ligas las ganas y las celebras cuando las has cerrado, nunca antes. Hoy todo el mundo cree que hay Liga donde no la había y que el Madrid está a nada de darle la vuelta a todos los pronósticos.
La remontada de los blancos es impresionante, pero el Barça sigue siendo el favorito. Al Bernabéu tienes que ir a ganar igual si vas a un punto, a cuatro o a siete. Tienes que ir a vencer porque es lo que has hecho toda la temporada. El Madrid ha estado toda una vuelta salvando match-balls. El último partido lo perdió contra el Barça. Y el Barça será el que tendrá la oportunidad de acabar con la increíble resistencia blanca. Sin duda, para mí este es el mejor escenario para los de Guardiola.
El empate de Valencia sirve para tres cosas. Da igual el orden. Una, para sumar un punto más que bueno, aunque muchos crean que con la victoria del Madrid es malo. Dos, para que sea más evidente lo logrado hasta la fecha. Es decir, que es muy difícil ganar holgado y hacerlo jugando muy bien. Y tres, que siempre hay detalles por pulir. La cuestión no es qué bueno que soy, sino qué he hecho mal para dejar de ser tan bueno. Si detectas tus propios fallos es más fácil corregirlos para no repetirlos ante el Chelsea.
Cuestión de velocidad
¿Los errores del Barça en Mestalla? Pequeños detalles que, sumados, hacen vulnerable al que parece invulnerable. No es una cuestión de actitud sino de velocidad. De velocidad a la que imprimes tus movimientos. Con y sin balón. Mueve la pelota rápido y, por más que te quieran dar, llegarán tarde. O será falta clara y tarjeta o ni siquiera falta porque eludes el contacto porque ya te has ido. Si no juegas fluido, hay más choques. Y eso significa menos control. A más interrupciones, menor el margen de sorprender al rival porque nada es más fácil que reagruparse con el juego parado. A más choques, mayor cifra de balones divididos y, con ello, mayor porcentaje de que en uno haya una contra.
El Chelsea puede ser tan o más rápido que el Valencia. Y seguro que mucho más fuerte. A músculo no le ganarás nunca. Para no entrar en su juego tendrás que hacer muy bien el tuyo. Es decir, ritmo de balón alto para conseguir ese medio metro de ventaja que nunca tendrás si no te lo ganas haciendo circular la pelota velozmente.
Acciones individuales sí, faltaría más, pero sólo cuando puedas y nunca en zona de peligro. Ahí es básico minimizar las pérdidas de balón en el pase horizontal, así como tratar de jugar el máximo de tiempo posible lejos de tu portería porque allí ellos son más grandes que tú. No es tanto quién marca a Drogba, sino cómo consigo que le lleguen los menos balones posibles. No es tanto quién marca a Lampard, sino cómo consigo que no haya segunda jugada para que él u otro no aparezcan. Una vez más, seré más bueno defensivamente en función no de cómo defienda, sino de cómo ataque. Si hago bien mis movimientos ofensivos, defenderé mejor. Si me atasco arriba, sufriré atrás seguro. Será interesante ver quién impone su estilo.
El origen del problema
Del partido de Mestalla también puedes aprender algunas otras cosas. Por ejemplo, que siempre hay que estar atento a todo. En el gol del empate de córner me da igual si Puyol obstaculizó a Valdés o fue a la inversa. Ni si la marca de Maduro era de este o de aquel. Esto lo ves rápido en el vídeo. La cuestión es cómo cedes este córner. Si el rival se lo gana a pulso, nada que objetar, pero si llega como llegó, cuidado porque es culpa tuya. Y llegó en una acción a balón parado casi en el centro del campo. Nadie estuvo atento para obstaculizar el lanzamiento en largo y todos mirando cómo volaba el balón a la cabeza de Silva, uno que por más bueno que sea con los pies sólo utilizará la cabeza si le dejas rematar como lo hiciste: libre de marca.
En el segundo gol del Valencia, media docena de jugadores del Barça fueron desbordados con una simple pared. ¿Alguien podía haber hecho una faltita, una obstrucción? Sí, pero ahí te dieron con tu propia medicina y esta se administra muy rápido si hay calidad en los atacantes.
Recurso de veterano
Si a esto le sumas la voluntad de los jugadores del Barça de querer recuperar el balón sin hacer falta o haciendo el mínimo número de ellas, te puedes encontrar en esta tesitura. ¿La hago o no? ¿Y dónde? Siempre lo más lejos del área y sí, una falta a tiempo que no una patada, una simple obstrucción, también es un recurso de veterano.
Detalles que tienen que servir para no cometer los mismos errores en el próximo partido. Porque, no lo olviden, el próximo es el Chelsea en la Champions. Para lo del sábado falta una eternidad.
[Only registered and activated users can see links] ([Only registered and activated users can see links])La remontada del Madrid es impresionante, pero el Barça sigue siendo el favorito y, en el peor de los casos, saldrá líder del Bernabéu. Pero antes llega el Chelsea y hay que corregir los errores de Mestalla.
Esta jornada ha servido para acabar con la cantinela de gano yo en Valencia, pierde el Madrid en Sevilla y a ganar la Liga en el Bernabéu. Las Ligas las ganas y las celebras cuando las has cerrado, nunca antes. Hoy todo el mundo cree que hay Liga donde no la había y que el Madrid está a nada de darle la vuelta a todos los pronósticos.
La remontada de los blancos es impresionante, pero el Barça sigue siendo el favorito. Al Bernabéu tienes que ir a ganar igual si vas a un punto, a cuatro o a siete. Tienes que ir a vencer porque es lo que has hecho toda la temporada. El Madrid ha estado toda una vuelta salvando match-balls. El último partido lo perdió contra el Barça. Y el Barça será el que tendrá la oportunidad de acabar con la increíble resistencia blanca. Sin duda, para mí este es el mejor escenario para los de Guardiola.
El empate de Valencia sirve para tres cosas. Da igual el orden. Una, para sumar un punto más que bueno, aunque muchos crean que con la victoria del Madrid es malo. Dos, para que sea más evidente lo logrado hasta la fecha. Es decir, que es muy difícil ganar holgado y hacerlo jugando muy bien. Y tres, que siempre hay detalles por pulir. La cuestión no es qué bueno que soy, sino qué he hecho mal para dejar de ser tan bueno. Si detectas tus propios fallos es más fácil corregirlos para no repetirlos ante el Chelsea.
Cuestión de velocidad
¿Los errores del Barça en Mestalla? Pequeños detalles que, sumados, hacen vulnerable al que parece invulnerable. No es una cuestión de actitud sino de velocidad. De velocidad a la que imprimes tus movimientos. Con y sin balón. Mueve la pelota rápido y, por más que te quieran dar, llegarán tarde. O será falta clara y tarjeta o ni siquiera falta porque eludes el contacto porque ya te has ido. Si no juegas fluido, hay más choques. Y eso significa menos control. A más interrupciones, menor el margen de sorprender al rival porque nada es más fácil que reagruparse con el juego parado. A más choques, mayor cifra de balones divididos y, con ello, mayor porcentaje de que en uno haya una contra.
El Chelsea puede ser tan o más rápido que el Valencia. Y seguro que mucho más fuerte. A músculo no le ganarás nunca. Para no entrar en su juego tendrás que hacer muy bien el tuyo. Es decir, ritmo de balón alto para conseguir ese medio metro de ventaja que nunca tendrás si no te lo ganas haciendo circular la pelota velozmente.
Acciones individuales sí, faltaría más, pero sólo cuando puedas y nunca en zona de peligro. Ahí es básico minimizar las pérdidas de balón en el pase horizontal, así como tratar de jugar el máximo de tiempo posible lejos de tu portería porque allí ellos son más grandes que tú. No es tanto quién marca a Drogba, sino cómo consigo que le lleguen los menos balones posibles. No es tanto quién marca a Lampard, sino cómo consigo que no haya segunda jugada para que él u otro no aparezcan. Una vez más, seré más bueno defensivamente en función no de cómo defienda, sino de cómo ataque. Si hago bien mis movimientos ofensivos, defenderé mejor. Si me atasco arriba, sufriré atrás seguro. Será interesante ver quién impone su estilo.
El origen del problema
Del partido de Mestalla también puedes aprender algunas otras cosas. Por ejemplo, que siempre hay que estar atento a todo. En el gol del empate de córner me da igual si Puyol obstaculizó a Valdés o fue a la inversa. Ni si la marca de Maduro era de este o de aquel. Esto lo ves rápido en el vídeo. La cuestión es cómo cedes este córner. Si el rival se lo gana a pulso, nada que objetar, pero si llega como llegó, cuidado porque es culpa tuya. Y llegó en una acción a balón parado casi en el centro del campo. Nadie estuvo atento para obstaculizar el lanzamiento en largo y todos mirando cómo volaba el balón a la cabeza de Silva, uno que por más bueno que sea con los pies sólo utilizará la cabeza si le dejas rematar como lo hiciste: libre de marca.
En el segundo gol del Valencia, media docena de jugadores del Barça fueron desbordados con una simple pared. ¿Alguien podía haber hecho una faltita, una obstrucción? Sí, pero ahí te dieron con tu propia medicina y esta se administra muy rápido si hay calidad en los atacantes.
Recurso de veterano
Si a esto le sumas la voluntad de los jugadores del Barça de querer recuperar el balón sin hacer falta o haciendo el mínimo número de ellas, te puedes encontrar en esta tesitura. ¿La hago o no? ¿Y dónde? Siempre lo más lejos del área y sí, una falta a tiempo que no una patada, una simple obstrucción, también es un recurso de veterano.
Detalles que tienen que servir para no cometer los mismos errores en el próximo partido. Porque, no lo olviden, el próximo es el Chelsea en la Champions. Para lo del sábado falta una eternidad.