Miguel
21/04/2009, 02:06
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El francés Zinedine Zidane aprovechó su visita a Sudáfrica para disputar un torneo amistoso para reconocer la importancia que tendrá para el país la celebración del Mundial y para recordar alguno de los momentos más emotivos de su carrera.
Así, sobre su último partido en el Real Madrid, en la despedida ante el Villarreal reconoce que, pese a su habitual templanza, estuvo a punto de llorar. "Quien me conozca podrá decirle que no se me da muy bien demostrar lo que siento, pero aquel partido fue diferente. Al alzar la vista hacia las gradas, vi a mis amigos y a mi familia. Estaban allí para brindarme su aliento. Por eso fue tan especial. Recuerdo que tuve que hacer un gran esfuerzo para contener las lágrimas", desveló, en una entrevista a ''FIFA.com''.
El galo fue "consciente" de estar jugando su último partido con el club, y se emocionó sobremanera porque le encanta jugar al fútbol, destacando como su principal gesta el título del Mundial de Francia en 1998: "Fue fantástico, un triunfo muy especial, y siempre se contará entre los mayores logros de mi carrera", destaca.
"Uno de los recuerdos más emotivos es el espectáculo de la gente abrazándose por las calles cuando nos proclamamos campeones del mundo aquel año en casa: una escena fabulosa. Eran personas de todo tipo y condición, blancas o negras, y muchas lloraban de alegría. Lo conservo como una de mis experiencias más gratificantes, y espero que ocurra lo mismo en Sudáfrica", deseó.
Sin embargo, entiende a los que se sienten "decepcionados" con los últimos resultados de los ''bleus''. "La selección ha atravesado un periodo muy complicado. Sin embargo, no tienen razón los que van diciendo que el equipo es malo. El equipo no es malo de ninguna de las maneras, aunque, como digo, no se encuentra en su mejor época. Francia sigue contando con jugadores extraordinarios, capaces de dar un golpe de timón en cualquier momento", valora.
"Jugar un Mundial en casa es increíble"
Zidane, que no quiso hacer pronósticos sobre la Copa de las Confederaciones, porque "compiten muchos equipos muy buenos" vuelve de Sudáfrica "impresionado" con "un país precioso" y considera "fantástico" que el Mundial se juegue en Sudáfrica por primera vez.
"Creo que el Mundial ofrece a ?frica la oportunidad de demostrar al resto del mundo de lo que es capaz, y a los equipos africanos la mejor ocasión de presentar al mundo su valía. Una de sus principales bazas será la de jugar en su tierra, y sólo eso supone de por sí una motivación inmensa", considera.
Así, recalca que "para cualquier futbolista, participar en una Copa Mundial representa un gran honor, pero cuando ese Mundial se celebra además en tu tierra, la sensación es increíble (...), la afición crea un ambiente muy especial, un aire distinto, que motiva mucho más a los jugadores".
El ex jugador instó a "todos los sudafricanos que lo disfruten a tope, cada segundo, porque puede que no vuelvan a vivir nada parecido jamás": "Estoy convencido de que va ser un acontecimiento fantástico y una experiencia completamente nueva para muchísima gente de este país".
Zidane que ya ha pasado página tras el incidente con Materazzi afirmando que "no quiere" hablar del tema y que eso "es historia" para él.
El francés Zinedine Zidane aprovechó su visita a Sudáfrica para disputar un torneo amistoso para reconocer la importancia que tendrá para el país la celebración del Mundial y para recordar alguno de los momentos más emotivos de su carrera.
Así, sobre su último partido en el Real Madrid, en la despedida ante el Villarreal reconoce que, pese a su habitual templanza, estuvo a punto de llorar. "Quien me conozca podrá decirle que no se me da muy bien demostrar lo que siento, pero aquel partido fue diferente. Al alzar la vista hacia las gradas, vi a mis amigos y a mi familia. Estaban allí para brindarme su aliento. Por eso fue tan especial. Recuerdo que tuve que hacer un gran esfuerzo para contener las lágrimas", desveló, en una entrevista a ''FIFA.com''.
El galo fue "consciente" de estar jugando su último partido con el club, y se emocionó sobremanera porque le encanta jugar al fútbol, destacando como su principal gesta el título del Mundial de Francia en 1998: "Fue fantástico, un triunfo muy especial, y siempre se contará entre los mayores logros de mi carrera", destaca.
"Uno de los recuerdos más emotivos es el espectáculo de la gente abrazándose por las calles cuando nos proclamamos campeones del mundo aquel año en casa: una escena fabulosa. Eran personas de todo tipo y condición, blancas o negras, y muchas lloraban de alegría. Lo conservo como una de mis experiencias más gratificantes, y espero que ocurra lo mismo en Sudáfrica", deseó.
Sin embargo, entiende a los que se sienten "decepcionados" con los últimos resultados de los ''bleus''. "La selección ha atravesado un periodo muy complicado. Sin embargo, no tienen razón los que van diciendo que el equipo es malo. El equipo no es malo de ninguna de las maneras, aunque, como digo, no se encuentra en su mejor época. Francia sigue contando con jugadores extraordinarios, capaces de dar un golpe de timón en cualquier momento", valora.
"Jugar un Mundial en casa es increíble"
Zidane, que no quiso hacer pronósticos sobre la Copa de las Confederaciones, porque "compiten muchos equipos muy buenos" vuelve de Sudáfrica "impresionado" con "un país precioso" y considera "fantástico" que el Mundial se juegue en Sudáfrica por primera vez.
"Creo que el Mundial ofrece a ?frica la oportunidad de demostrar al resto del mundo de lo que es capaz, y a los equipos africanos la mejor ocasión de presentar al mundo su valía. Una de sus principales bazas será la de jugar en su tierra, y sólo eso supone de por sí una motivación inmensa", considera.
Así, recalca que "para cualquier futbolista, participar en una Copa Mundial representa un gran honor, pero cuando ese Mundial se celebra además en tu tierra, la sensación es increíble (...), la afición crea un ambiente muy especial, un aire distinto, que motiva mucho más a los jugadores".
El ex jugador instó a "todos los sudafricanos que lo disfruten a tope, cada segundo, porque puede que no vuelvan a vivir nada parecido jamás": "Estoy convencido de que va ser un acontecimiento fantástico y una experiencia completamente nueva para muchísima gente de este país".
Zidane que ya ha pasado página tras el incidente con Materazzi afirmando que "no quiere" hablar del tema y que eso "es historia" para él.